Libertad Dactilar

He decidido llamar así este post… Por que sí, porque yo lo valgo. Sé que me va a valer muchas críticas, pero me da igual. A ver como lo planteo.

Cuando en la antigua Grecia se creó la democracia, tenían muy claro que eso de dejar votar a todo el mundo era una cosa bastante absurda. Hasta Platón defendió que cuando la democracia se pasaba de democracia, pasaba a ser una demagogia. Y así se quedó.

Hay una palabra que a mi me gusta mucho. Es el «Gatopardismo» (también conocido como Lampedusianismo). Se resume en ese viejo aforismo de «cambiar todo, para que no cambie nada». Pues bien. Nuestra democracia formal no es más que un claro ejemplo de gatopardismo. Un buen día, las élites económicas decidieron hacernos un regalo. Ibamos a poder elegir el gobierno. Ojo, siempre que sea un gobierno a elegir entre uno o dos partidos políticos que sean fácilmente dominables. Para ello basta con darles muuuuucho dinero y dejar votar a todo atontao que acredite tener más de 18 años. La jugada es muy fácil. Si dejamos votar a cualquiera, los que no leen un periódico en su vida solo votarán a los que tienen mucho dinero porque se lo pueden gastar en publicidad.

Y así funciona el sistema. Llegan las elecciones y gana el PSOE o gana el PP. Y los dos hacen más o menos la misma política. Mientras, los atontaos que han votado, siguen viendo sus programas de televisión favoritos. Que si mujeres y hombres y Viceversa, que si Sálvame, que si Belén Esteban, que si telebasura varia y variada. Y nada va a cambiar. El 60% de los votantes ni conoce a IU, y aun peor, porque estos de IU en cuanto pueden trincan como el que más, como sabemos en Andalucía. Más del 80% no conoce siquiera a una opción tan válida como UPyD. Es de chiste.

Es difícil luchar contra esto. Requeriría una serie de acciones extremadamente impopulares. O aumentamos el nivel de educación de la ciudadanía, algo obviamente difícil, o directamente hacemos algo para que la tontocracia se convierta en algo más complicada. Cambiar el sistema de financiación de los partidos políticos sería un buen paso. Limitar sus estructuras, otro (y de paso eliminaría parte de la corrupción institucionalizada). Crear un sistema electoral en el cual haya que hacer algún esfuerzo para que los ciudadanos pasivos no votaran, sería otro. Estoy seguro que abrir las oficinas del censo para inscribirse a las votaciones durante las horas de emisión de telebasura, eliminarían muchos de los votantes circunstanciales y desinteresados que hay ahora. Aunque a mi me encantaría un sistema que solo dispensase papeletas al que contestara al menos el 33% de una serie de preguntas tan sencillas como: «Como se llama el coordinador general de IU» o «Quien es el candidato a la presidencia del Gobierno del PSOE». o «Como se llama el candidato a presidente de UPyD». O cosas así. Preguntas sencillisimas. 5 preguntas de nada.

Me dirá alguno… «ESO ES ANTIDEMOCRATICO»… ¿Perdón?¿Entonces la democracia consiste en dejarnos gobernar por el criterio de gente que no tiene criterio alguno? Conozco mucha gente que no vota a los socialistas «porque queman iglesias». Y otros argumentos peregrinos. Esos son los que eligen los que nos gobiernan. Hemos entrado en el auténtico gobierno de los peores. Una verdadera kakistocracia. La desinformación jamás fue compañera de la democracia y eso es en lo que estáis convirtiendo esto con vuestra absurda visión políticamente correcta.

Alguno me dice. Se empieza asi y luego no se deja votar a los gays, a los comunistas, etc. Vamos a ver… ¿He dicho yo eso? Fijar requisitos OBJETIVOS no es apartar a nadie por condición o ideología. Eso ya sería dictatorial. Espero mejores aportaciones que esas en vuestros comentarios.

Como este blog no llega a mucha gente, no espero gran cantidad de comentarios. Nada me gustaria más que ver un aluvión de ideas para mejorar el sistema. Pero entre la poca gente que nos lee y lo acomodaticios que son… Así nos va…